Dudas frecuentes en el cultivo de Marihuana Autofloreciente
Lista de contenidos
- Características principales de las plantas Automáticas
- ¿Cuáles son las ventajas de cultivar Autoflorecientes?
- ¿Cuáles son las desventajas de cultivar Autoflorecientes?
- ¿Por qué las plantas autoflorecientes se quedan pequeñas?
- ¿Se pueden podar las plantas automáticas?
- ¿Qué maceta y qué fertilizantes usar en el cultivo de Autoflorecientes?
- ¿Se puede cultivar autoflorecientes en SCROG y en SOG?
Características principales de las plantas Automáticas
Las semillas de marihuana Autoflorecientes o Automáticas se caracterizan por ser plantas que florecen solas, es decir, que no son fotodependientes, no dependen del ciclo de luz y oscuridad tal y como si sucede con las semillas feminizadas de cannabis.
Una vez la semilla ha germinado, esta pasa por un período de crecimiento vegetativo de unos 15-21 días y luego inicia la floración independientemente de las horas de luz que esté recibiendo.
Esta característica hace que sean plantas muy apreciadas por muchos cultivadores, puesto que ofrecen una cosecha en solo 60-80 días desde la germinación, mucho más rápidamente que las genéticas tradicionales.
Sin embargo, muchos otros cultivadores no han plantado nunca semillas autoflorecientes porque creen que son más difíciles de cultivar o bien que requieren de cuidados especiales, cuando simplemente es suficiente tener en cuenta algunos conceptos básicos a la hora de trabajar con ellas.
Por ese motivo, en este post queremos damos respuesta a las preguntas más frecuentes sobre las Autos, así como desvelar los pros y los contras del cultivo de marihuana autofloreciente.
¿Cuáles son las ventajas de cultivar Autoflorecientes?
Las principal ventaja de este tipo de genéticas es, sin duda, su rápido ciclo de desarrollo de entre 65 y 90 días dependiendo de su genética y de su carga sativa, que nos permite disfrutar de su cosecha de cannabis de forma muy rápida.
Esto es ideal para aquellos cultivadores que no quieran invertir mucho tiempo en su cultivo, para hacer varias cosechas durante la temporada de exterior, de forma escalonada, y así conseguir una abundante producción de flores aprovechando al máximo espacios reducidos, o bien para tener algo que fumar durante el verano, antes de que nuestras plantas feminizadas o regulares de exterior terminen su desarrollo.
Además, no suelen superar los 100-150cm de alto, lo que las hace perfectas para cultivos de terraza o de balcón, dándonos la certeza de que no molestaremos a los vecinos y de que no nos las verán, pudiendo sembrarlas sin miedo casi en cualquier parte.
Y quienes las pongan en un cultivo de interior, saben de antemano que no les causarán problemas de altura, ya que se limitan ellas solas de forma natural o bien podemos limitar su desarrollo con el tamaño de la maceta.
Además, no necesitan de un cambio de fotoperíodo para iniciar su floración, sino que empiezan a crear cogollos por sí mismas al cabo de 15-21 días de crecimiento vegetativo, lo que implica que, a más horas de luz les demos, más rápido crecerán y mayor cantidad de flores producirán, siendo ideal cultivarlas en 20h/4h.
Esto hace que no les afecte la contaminación lumínica, es decir, que no hay forma de que su floración se interrumpa una vez esta ha empezado, lo que nos garantiza obtener resultados satisfactorios en el tiempo prometido, sin revegetaciones.
En cuanto a los nutrientes, si usamos una tierra para marihuana con alimento para 3 semanas es suficiente con aplicar solo fertilizantes para floración, sin los de crecimiento, ya que sus necesidades de nitrógeno son muy bajas en comparación con una genética feminizada.
¿Cuáles son las desventajas de cultivar Autoflorecientes?
En cuanto a los inconvenientes que ofrecen, muy pocos en comparación a las ventajas, podemos destacar su tamaño y su corto tiempo de vegetativo que harán que siempre obtengamos plantas pequeñas, lo que repercute en que no superarán los 150-200g/planta, tanto en cultivos de marihuana en exterior como en interior.
Este punto es realmente subjetivo, pues será un inconveniente para los amantes de las plantas enormes y llenas de colas de cogollos, pero será ideal para quien quiera una cosecha discreta con un buen ratio cogollos/tamaño.
Otra diferencia sería que las autos ofrecen unos niveles de THC de entre 18% y 20% de media, el similar a la mayoría de genéticas feminizadas, pero es cierto que estas últimas pueden ofrecer una mayor concentración de este cannabinoide, llegando incluso al 25%-28% en algunos casos, mientras que en las autos esto no sucede.
Un punto que si debemos tener en cuenta es que no nos permiten sacar esquejes con los que trabajar, es decir, que no podremos conservar una planta madre a partir de un clon, ya que dichos clones se comportan igual que la madre, empezando la floración cuando alcancen la madurez, al cabo de poco tiempo.
Finalmente, algunos cultivadores opinan que no son plantas aptas para el cultivo interior, dado que necesitan una maceta grande y más alta que ancha (de entre 15 y 20 litros) para ofrecer todo su potencial, ocupando mucho espacio en el armario y permitiéndonos cultivar pocas plantas cada vez, lo que hace que no se aproveche bien toda la energía lumínica invertida.
Pero esto es solo una opinión, ya que también podemos optar por poner más plantas con macetas más pequeñas con un fotoperíodo de 20h/4h para conseguir la máxima productividad y producción de resina posible aprovechando al máximo sus capacidades, lo que no sucede en cultivos de exterior.
¿Por qué las plantas autoflorecientes se quedan pequeñas?
Sabiendo todo lo dicho hasta ahora es momento es momento de abordar esta pregunta que seguro que todos nos hemos hecho alguna vez al cultivar genéticas Autoflorecientes. Mis plantas no han crecido. ¿Por qué?
Pues bien, en resumidas cuentas, podemos decir que se debe o bien a causas ambientales, o bien al estrés, o bien al tamaño de la maceta y a la cantidad de sustrato.
Es decir, las plantas autoflorecientes tienen un periodo de crecimiento muy corto, como ya hemos dicho, y deben aprovecharlo al máximo para crecer todo lo posible.
Además, cuanto más espacio tenga la raíz principal de la planta, más crecerá también esta en altura, motivo por el que estas plantas muestran su máximo potencial si las sembramos en pleno suelo, ya que no encuentran la limitación que impone el suelo de la maceta.
Si sembramos la planta en una maceta demasiado pequeña, o esta recibe muy pocas horas de luz solar, o mal tiempo y frío, o bien si usamos una tierra muy compacta que dificulte el desarrollo radicular, o le damos poco fertilizante, o bien la atacan los hongos o las plagas del cannabis, la planta frenará su desarrollo, quedándose muy pequeña.
Lo ideal es sembrarla en una maceta honda o en pleno suelo usando un sustrato aireado, equilibrado y de calidad, durante la temporada de primavera – verano, cuando ya no hay frío ni heladas, con una buena cantidad de horas de luz (ideal 16h-20h), regándola con mimo, evitando tanto las carencias como los excesos, para conseguir un óptimo desarrollo.
¿Se pueden podar las plantas automáticas?
Como ya hemos dicho, no se aconseja hacer clones de marihuana de las plantas automáticas por que estos empiezan a florecer, pero tampoco se recomienda podarlas, y mucho menos en la fase de crecimiento, ya que al cortar sus ramas, generamos estrés y frenamos su desarrollo.
Es decir, que si la podamos, la herida que le infligimos desajusta el metabolismo de la planta, alterando sus funciones y haciendo que se pare hasta que esta ha sanado, lo que significa que el crecimiento se detiene, y mengua la altura final que conseguimos. Es decir, le quitamos recursos a la planta para mostrar todo su potencial, malgastando sus capacidades.
¿Qué maceta y qué fertilizantes usar en el cultivo de Autoflorecientes?
Si vamos a sembrarlas en una terraza o en interior, deberemos hacerlo en una maceta, ya sea rígida o tipo Smart Pot. El volumen que elijamos determinará el tamaño final de las plantas, haciéndose más pequeñas a medida que reducimos el volumen de los contenedores.
Si queremos que las plantas ofrezcan todo su potencial, debemos usar una maceta cónica de 18L, con mayor profundidad que anchura, que permite que la raíz principal se desarrolle al máximo. Pero si deseamos controlar su altura para un cultivo discreto, podemos optar por macetas de 10-12l como máximo.
En cuanto a los fertilizantes, podemos usar los que más nos gusten, tanto orgánicos, como órgano-minerales como minerales puros, siempre que tengamos en cuenta que no necesitan altas concentraciones de nitrógeno debido a su corto crecimiento vegetativo.
Si nos excedemos, es posible que los cogollos no compacten bien, quedando aireados y demasiado verdes, perdiendo bastante sabor.
Resulta ideal usar una tierra All Mix, que lleva fertilizante para las tres primeras semanas del desarrollo de las plantas, acompañado de un estimulador radicular, y luego usar fertilizante de floración con sus respectivos estimuladores y potenciadores para ahorrarnos problemas.
¿Se puede cultivar autoflorecientes en SCROG y en SOG?
Las variedades de marihuana automáticas no son aptas para este método de cultivo. Esto se debe a que las plantas cultivadas en SCROG requieren varias semanas de crecimiento para poder desarrollar suficientes ramas y llenar así el espacio de cultivo, algo que no se puede hacer con ellas dado que poseen un tiempo de crecimiento limitado a 2-3 semanas.
Para el cultivo de marihuana con el método SCROG, se recomiendan variedades no autoflorecientes con un porcentaje sativo de al menos un 50%. Para este tipo de cultivo, necesitamos dar un periodo de crecimiento más largo que para cultivo SOG, o sea de unos 20 días como mínimo.
Las variedades recomendadas para el método de cultivo SCROG son Easy Haze, Amnesika 2.0, Fruity Jack y nuestra variedad regular Jamaican Blueberry BX.
En cuanto al cultivo en SOG, se puede llegar a hacer, usando macetas pequeñas (5-7L) para que las plantas desarrollen solo una punta central sin apenas ramificación, llenando el espacio de cultivo con ellas, pero conseguiríamos el mismo resultado que usando plantas feminizadas, sin ninguna ventaja.
¡Feliz cultivo!