El mundo moderno de la marihuana ofrece dos tipos de semillas: las semillas feminizadas, que producen solo plantas hembras, y las semillas regulares, que dan tanto machos como hembras.
Las semillas regulares son, por tanto, el fruto del encuentro entre una planta de marihuana macho y una planta hembra, dando una descendencia regular, que dará machos y hembras.
Por lo general, se observan alrededor del 50% de plantas macho y el 50% de plantas hembras en un cultivo de semillas regulares, aunque a veces se pueden encontrar más hembras que machos y viceversa.
Semillas regulares, ideales para crear híbridos de marihuana
Si queremos una cosecha de marihuana de calidad sinsemilla, o sea sin semillas en sus cogollos, solo tendremos que eliminar las plantas macho del cultivo tan pronto como sean identificadas.
Al revés, es posible crear nuevos híbridos de marihuana, o reproducir una variedad, guardando una o más plantas macho que se utilizarán para polinizar las plantas hembras.
Por lo tanto, las semillas regulares son perfectas para el cultivador que quiere crear su propia variedad de marihuana así como preservar y reproducir su genética favorita.
Semillas de marihuana para seleccion de plantas madre
Las semillas regulares dan plantas robustas que resisten bien a los diversos estreses que pueden afectar a un cultivo, por lo que estarán perfectamente adaptadas para mantener la genética a largo plazo.
Podremos seleccionar la planta que mejor cumpla con nuestros criterios y mantener una planta madre de la misma, para producir esquejes de marihuana y cultivar esta variedad a nuestro antojo.